Vistos así son como juguetes a escala, puestos al azar sobre una montañita de tierra, y que daría uno para que la historia sea esa, sólo como un juego de niños, generamos un gran accidente, hacemos ruidos estrámboticos, contemplamos la escena diez segundos, y volvemos a poner los vagoncitos en la vía, como si nada hubiera pasado, cuanto daría uno para volver los vagoncitos a la vía como si nada hubiera pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario